Nacional: Gottardi, Zainadine, Miguel Rodrigues, Ezzat, Marçal, Ayala, Suk, Gomaa, Mario Rondón, Aly Ghazal y Marco Matías. También participaron Camacho, Sequeira, Boubacar, Willyan, Lucas, Reginaldo, Rui Silva, Rui Correia y João Aurelio.
En un ambiente espléndido, Nacional ha saldado con una victoria un compromiso que no ha sido en ningún caso sencillo, no solamente por lo ajustado del marcador, sino porque su rival, el Sunderland de Gustavo Poyet demostró ser un equipo muy bien preparado.
En la primera mitad, solamente las buenas actuaciones de Gottardi (tres de ellas clarísimas) impidieron que los ingleses llegaran con ventaja al descanso. Cabe destacar especialmente un mano a mano que el guardameta brasileño solventó con éxito ante Fletcher, rondando el minuto 40.
Sunderland, exigió que Nacional cerrara sus líneas, y a la hora de defender, su 4-2-3-1 se transformaba en un en un 4-4-1-1 en el que Mario Rondón ocupaba posiciones de banda, izquierda o derecha.
Fue interesante ver a hombres como Mario Rondón, Suk o Marco Matías, enfrentarse a defensores como O´Shea o Wes Brown. Aunque casi siempre tuvieron las de perder, dejaron muestras de sus virtudes, especialmente el venezolano, que es cada vez un jugador más completo.
Tras el descanso, antes del minuto 5, Zanadine, muy seguro ante hombres peligrosos como Giaccherini y Wickham, había salvado un gol sobre la línea, por lo que parecía que la historia no seria diferente, en cuanto al dominio y las ocasiones de peligro. Sin embargo, los de Funchal dieron un paso adelante, y por ejemplo, en el minuto 60, un buen centro al hueco de Camacho, fue rematado con potencia, rozando el palo, por Suk.
De nuevo, Camacho fue destacado en el 69, cuando en una jugada personal por la banda, remató desde cerca, y sin suerte. Desde entonces, y hasta el final, Sunderland recuperó el mando del juego, a pesar de que el juego se interrumpió en numerosas ocasiones, debido a los continuos cambios. Uno de ellos, por cierto, supuso la entrada del ex jugador de Marítimo Valentín Roberge.
Cuando ya nadie lo esperaba, llegó el gol de un Nacional que no le perdió la cara al partido en ningún momento y que ha sabido sufrir y adaptar su juego a un equipo muy diferente a lo que son los clubes de la liga portuguesa. Lucas João recogió un buen centro de Siqueira e hizo un buen tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario